Reclaman justicia para víctimas

Reclaman justicia para las víctimas de brote de meningitis en Matamoros

Gabriela Sustaita

A casi dos años del brote de meningitis en dos clínicas privadas de Matamoros, los familiares de las mujeres fallecidas continúan esperando justicia. Pese a que el padecimiento fue adquirido presuntamente por la aplicación de una inyección epidural como parte de un procedimiento quirúrgico estético, hasta la fecha no hay responsables sancionados, y existen versiones de que una de las clínicas involucradas sigue en funcionamiento.

Agustín Hernández Cardona, padre de Anakary, una de las víctimas mortales, expresó su preocupación ante la falta de avances en el caso. Señaló que, además de la impunidad, le inquieta que establecimientos como la Clínica K-3 continúen atendiendo pacientes sin que haya consecuencias por lo ocurrido.

Si bien, específicamente en este caso, hay cuatro personas imputadas por homicidio culposo, entre ellas el cirujano Luis Manuel “N” y la anestesióloga Karina “N”, el representante legal de la familia, Juan Carlos Ruiz Delgado, advirtió que existen indicios de que la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas no tiene intención de ejercer acciones penales contra los implicados.

Anakary se sometió a un procedimiento quirúrgico el 12 de abril en la Clínica K-3 y fue dada de alta al día siguiente. Sin embargo, el 17 de abril fue internada en otro hospital, donde se le diagnosticó meningitis. A pesar de los esfuerzos médicos, falleció un mes después.

La familia de la joven relató que, en un principio, la clínica intentó llegar a un acuerdo monetario. No obstante, ellos manifiestan que su única exigencia es que se haga justicia.

Cabe recordar que, entre residentes de Texas y Tamaulipas, más de 20 personas dieron positivo a meningitis. En el caso de nuestro estado, al menos tres personas fallecieron, lo que llevó a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) a ordenar la clausura de ambas clínicas (K-3 y River Side).