
Tragedia en Padilla revive cuestionamientos sobre seguridad laboral en Comapas
Tragedia en Padilla revive cuestionamientos sobre seguridad laboral en Comapas
Santiago Martínez
La reciente muerte de dos trabajadores de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa) en Padilla, ocurrida en el kilómetro 46 de la carretera a Matamoros, reactivó el debate sobre las condiciones de seguridad en que laboran los empleados de estos organismos.
Cabe recordar que dos trabajadores de la comapa en Padilla ingresaron a una alcantarilla que se ubica sobre la carretera salido de la cabecera municipal y perdieron la vida intoxicados, presuntamente por falta de equipo y medidas preventivas.
En respuesta, la gerencia de Comapa Victoria a través de su titular Fernando García Fuentes, aseguró que en su caso se cumple con las normas de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social y que el personal cuenta con equipo y capacitación para realizar trabajos en espacios confinados. La administración afirmó que, tras la tragedia de junio de 2021, cuando tres empleados murieron al ingresar a un cárcamo al poniente de la ciudad, se reforzaron protocolos internos y se mantienen acciones preventivas permanentes.
Pese a estas declaraciones, los hechos ocurridos en el municipio de Padilla vuelven a exhibir la vulnerabilidad de las cuadrillas en campo, así como la disparidad en las condiciones de seguridad entre organismos municipales. Mientras Victoria sostiene que se aplican protocolos desde 2021, en Padilla el desenlace reciente revela que las medidas no siempre son suficientes o aplicadas de manera efectiva.
El saldo de cinco trabajadores fallecidos en menos de cuatro años por causas similares en distintos municipios plantea una realidad difícil de ignorar: las tragedias se repiten, aun cuando existen protocolos que, en el discurso, buscan evitarlas.