
SIN CORTAPISAS
Por: Claudia Vázquez Andrade
Los yerros de la comunicación
Por alguna extraña razón, la comunicación social dejó de tener la importancia que debiera para los gobernantes de Tamaulipas, bueno, aclarando, para algunos municipios, porque en lo referente al Estado, este ha rectificado cuando lo ha considerado necesario, y como ejemplo está el caso de la vocería de Secretaría de Seguridad Pública, cuyo titular fue removido recientemente dado los resultados negativos de su gestión y las confusiones o malos entendidos que provocó.
Atrás quedaron los tiempos cuando los “jefes de prensa”, eran verdaderos maestros de la comunicación, de tal suerte que la comodidad de su oficina no los tentaba para dejar en manos de sus asistentes y no acudir a un evento, aunque no fuera importante y cuidar todos los aspectos de comunicación e información.
Hoy, vaya usted a saber porque, hay municipios en donde ni siquiera tienen titulares en esa área, mientras que, en las ciudades grandes, son contadas aquellas en donde el alcalde o alcaldesa, se preocupó por contratar a un profesional del oficio.
Y claro que como era de esperarse los resultados en ambos casos son notorios y públicos.
Los escándalos por su trabajo y ambición no han quedado en la oscuridad, ahí está el caso de Reynosa, en donde han denunciado en repetidas ocasiones el presunto saqueo del presupuesto destinado para la comunicación social, de tal suerte; que en nada ha beneficiado a su alcalde, que, siendo honestos, no habría estrategia alguna que le ayude por sus pobres resultados, lo mismo sucede al munícipe de Victoria, que ya es un caso perdido, que nada le hará recuperar la confianza, el respeto y el respaldo popular.
Mientras que otro ejemplo de yerros en la materia de prensa, es Tampico, en su corto tiempo de gobierno la presidenta municipal, Mónica Villarreal ya lleva cuatro “jefes de prensa” y su imagen no logra mejorar.
Y eso no sucederá por dos razones. Una, por el resultado de su trabajo, que no logra superar, vaya, ni siquiera igualar a su antecesor, y dos; por la falta de oficio de su titular, Dante García, el cual fungía como su secretario particular y lo hizo jefe de prensa. Vaya, no es lo mismo abrir una puerta, que manejar todo un equipo de comunicación y dar a conocer las bondades y el trabajo de un alcalde.
Por lo pronto; en Tampico, las cosas van de mal en peor, al grado que el nuevo titular de comunicación social ya pide auxilio al desconocer el tema, además; de la falta de equipo, dicen que no hay quinto malo y puede ser el caso.