
SIN CORTAPISAS
Por: Claudia Vázquez Andrade
“acalambran” a constructores
Tamaulipas podría hacer historia en el renglón del combate a la corrupción, porque el gobierno en turno ha dado muestras de voluntad política para no dejar hacer y dejar pasar, de ahí que haya cientos de expedientes radicados, unos a la Fiscalía General de Justicia del Estado, y otros a la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, en contra de cualquier cantidad de exfuncionarios cabecistas por la presunta responsabilidad de abuso del ejercicio del poder y malversación de fondos públicos.
Para nadie es un secreto, que, desde la llegada a Tamaulipas del gobierno llamado de la cuarta transformación, han hecho público los presuntos desfalcos a casi todas las secretarías, irregularidades encontradas, unas, durante el proceso de entrega recepción, y otras, resultado de auditorías practicadas de manera ex profesa.
Sin embargo, extrañamente, de los cientos de denuncias presentadas, no llega a diez el número de exfuncionarios llamados a cuentas, y de los vinculados solo uno se encuentra recluido en prisión, mientras que el resto sigue el proceso judicial desde la comodidad de su hogar.
La presunción en estos casos, es que la procuración y administración de justicia estaba, sino es que aún está, al servicio del ex gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, de ahí la lentitud o pereza cómplice de estas dependencias.
Pero hoy, la voluntad de justicia, si es que se puede llamar así, va más allá, porque ahora los “acusados”, son los constructores; 21 empresarios de la industria de la construcción, serán enjuiciados por el Tribunal de Justicia Administrativa, así lo aseguró la contralora estatal, Norma Angélica Pedraza Melo.
Fue el Instituto Tamaulipeco de Infraestructura Física Educativa (ITIFE), quien dio vista de una denuncia con varias obras implicadas que no fueron concluidas, mientras que otras se encuentran con problemas estructurales.
En pocas palabras, los constructores “cabecistas” tendrán que explicar el porque de la situación de estas obras, y claro que como siempre sucede, surgen interrogantes como: ¿Quién supervisaba las obras? ¿Por qué se pagaron si estaban inconclusas? ¿hubo dádivas de por medio?
En fin, los acusados tendrán que responder muchas preguntas, esperemos que la procuración y administración de justicia sea mas ágil en estos casos, que quiérase reconocer o no, va a terminar por alcanzar a los mismos exfuncionarios del cabecismo.
No cabe duda, que se podría presumir que todos los mandos de la administración panista actuaron de la misma manera y beneficiaron a una sola persona: su jefe