Padre rechaza evaluación sicológica a Carlos; se declara en “rebeldía”
El Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa en la Ciudad de México notificó a Fabián Santamaría, padre de Carlos, el unamita de 13 años que sufrió acoso y difamación por parte de personal académico de la propia UNAM, que se designó a la maestra Miriam Camacho Valladares para realizar una evaluación sicológica del menor tras los hechos, en la Facultad de Psicología, pero éste se declaró en “rebeldía” y no llevará a su hijo a dicha ponderación porque tiene miedo de que la máxima casa de estudios sea juez y parte.
“No está claro para qué quieren esa evaluación, qué van a medir, cómo lo van a medir, si es una batería de pruebas, si es una entrevista, a mí me parece un arma peligrosa; no tengo confianza porque me parece que sería una evaluación a modo”, argumentó.
En entrevista con Excélsior, Fabián adelantó que el próximo semestre Carlos concluirá 50% de los créditos de la licenciatura de física biomédica e intentará cursar química como una segunda carrera.
“Y de pronto me da miedo que vayan a decir, con esta dichosa evaluación, que Carlos tiene una sobrecarga de trabajo y que no me lo vayan a dejar estudiar esta segunda carrera, no sé, pero yo no confió para nada, así que no lo voy a llevar y asumo las consecuencias que haya”.
Para Fabián, es incongruente que se envíe a Carlos a una evaluación sicológica y contra los agresores no se tome ninguna medida.
“Es como si te roban y te dicen que en lugar de castigar al ladrón van a ver qué tanto te afectó el delito, eso es posterior, pero primero se tiene que actuar en contra del delincuente y luego ya vienes a dar la atención postraumática, porque si no todo queda impune”, comparó.
En septiembre Excélsior dio a conocer que un tribunal federal otorgó un amparo a Carlos, el universitario más joven en la historia de la UNAM para que la institución determinara en qué medida “el acoso y la difamación de la que fue víctima” durante su primer semestre permeó en la comunidad universitaria y, a partir de dicho análisis, reparara el daño que sufrió.
Luego de dos meses, la UNAM acató el amparo, sin embargo, Fabián Santamaría denunció que no tomó acciones que involucren a los acosadores del niño universitario y por lo tanto no son suficientes para resarcir las afectaciones que sufrió su hijo.
En la respuesta que la Facultad de Ciencias de la UNAM dio a la sentencia del amparo promovido por el padre de Carlos, cuya copia tiene Excélsior, se contempla canalizar a Carlos a la Facultad de Psicología para su atención, a fin de que “determine las repercusiones que pudo haber sufrido en su entorno sicosocial, por el probable acoso y difamación de los que presuntamente fue víctima como alumno de esta universidad y, en su caso, brinde el acompañamiento sicológico que amerite”.