Exigen 100 mdd a EU por muerte de migrante
Defensores de una guatemalteca que murió baleada por un agente de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos el año pasado exigen 100 millones de dólares como indemnización.
La reclamación legal a nombre de Claudia Patricia Gómez González fue presentada un año después de su muerte en un momento en que el gobierno de Estados Unidos lucha con el aumento de centroamericanos que cruzan su frontera sur y con la muerte de seis niños que habían estado bajo custodia de las autoridades de inmigración.
La Unión Americana de Libertades Civiles de Texas presentó la reclamación bajo la Ley Federal de Demandas por Agravios como paso previo a presentar una demanda.
Gómez González cruzó la frontera entre Estados Unidos y México en Texas junto con varios migrantes. Fueron confrontados por un agente de la Patrulla Fronteriza, quien abrió fuego y la mató.
La denuncia dice que Gómez González “no representaba una amenaza para nadie, como resulta obvio desde un primer vistazo”, y que no iba armada ni huía como lo hacían otros en el grupo de migrantes.
Exige 50 millones de dólares por lesiones personal y el mismo monto por lo que describe como el homicidio culposo de Gómez González.
Su vida era tan valiosa como la de cualquier otro, y su familia merece justicia por su pérdida”, dice Andre Segura, el director legal del grupo. “Nuestro gobierno tiene la responsabilidad de tratar a todos con apego a la ley, humanamente y con respeto, sin importar cómo llegaron a este país”.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), la agencia que supervisa a la Patrulla Fronteriza, se negó a comentar el jueves. El primer comunicado de la CBP del 23 de mayo de 2018 sobre la muerte de Gómez González decía que el agente utilizó su arma de fuego luego de ser atacado por “varios sujetos con objetos contundentes”. La agencia afirmó entonces que Gómez González era una agresora.
La agencia actualizó su comunicado un día después para decir que Gómez González era “un miembro del grupo” que encaró al agente e ignoró las órdenes de tirarse al piso. El comunicado decía que el agente hizo un disparo.
En aquel momento, el agente, quien no fue identificado, fue suspendido. La CBP se negó a comentar el miércoles sobre el estatus del agente o la denuncia presentada. George Altgelt, un abogado del agente, no respondió un mensaje telefónico.
Gómez González era de San Juan Ostuncalco, en las afueras de la ciudad de Quetzaltenango, en el occidente de Guatemala. Sus familiares dijeron que había estudiado contabilidad forense y buscaba ser aceptada a la universidad estatal, pero no logró pasar tres exámenes de admisión. Viviendo en la pobreza e incapaz de encontrar trabajo, se fue a Estados Unidos.
Más de 160.000 personas de Guatemala fueron aprehendidas en la frontera entre México y Estados Unidos entre octubre y abril. En el velorio de Gómez González una mujer dijo que varios aldeanos habían partido rumbo a Estados Unidos en busca de trabajo.
Somos pobres, no hay trabajo, por eso se va la gente”, dijo la mujer, Guadalupe Carreto.