Por COVID-19 aumentan necesidades alimentarias en hospitales.
Por: José Gregorio Aguilar Torres.
Desde las últimas semanas del año pasado, el comedor comunitario “Manos Extendidas” de la iglesia Getsemaní extendió su red de apoyo a los hospitales donde pasan la noche los familiares de los pacientes internados por algún problema de salud.
El pastor Obed Gerónimo informó que también se brinda esa protección alimentaria a los limpiaparabrisas que se encuentran en los diferentes cruceros viales de la ciudad.
Indicó que la pandemia ha golpeado fuertemente a toda la sociedad, pero como es lógico de suponer, hay grupos más vulnerables que otros y que además tienen a familiares enfermos en los hospitales, lo cual agudiza su situación de pobreza.
La pandemia visibilizó aún más esta desigualdad social que padecen algunos grupos de la población, y esa es la razón por la cual se ha multiplicado el apoyo que el comedor Manos Extendidas proporciona.
Los miembros de esta congregación visitan las diferentes instituciones hospitalarias como el Hospital General y el Civil, así como el IMSS y el ISSSTE en los cuales pernoctan familias que tienen a sus seres queridos internados; muchas veces son familias de muy escasos recursos económicos que ni siquiera tienen para comer y llevarles un poco de alimento alivia sus necesidades.
