Dos cazadores escapan de milagro tras ataque de oso
Una pareja de cazadores vivió una situación de riesgo en el sur de Colorado que terminó con un oso muerto y el hombre mordido por el animal y herido de dos balazos por su mujer, informaron este viernes las autoridades locales.
Según un comunicado de la oficina de Parques y Vida Salvaje de Colorado (CPW, en inglés), los hechos sucedieron en un bosque cercano al centro turístico de Pagosa Springs, donde la pareja estaba cazando y ahora es investigada para determinar si cometieron algún delito.
La agencia, que no difundió los nombres de los involucrados, señaló que los hechos ocurrieron cuando el hombre “accidentalmente” pisó al oso, que reaccionó mordiéndolo en la pierna, tras lo cual la mujer se apresuró a disparar varias veces al animal y en el proceso hirió al hombre.
Según la CPW, la pareja “actuó apropiadamente” al buscar atención médica para el hombre, que permaneció hospitalizado dos días.
Personal de esta agencia localizó los restos mortales del oso y determinó que el animal no padecía de rabia u otras enfermedades.
El oso no tenía más de 3 años y pesaba sólo unos 55 kilos, la mitad del peso promedio habitual de los osos cazados en Colorado, mientras que el hombre no tenía licencia para cazar, pero sí su mujer, que fue la que mató al mamífero.
A raíz de este incidente, ocurrido el pasado 4 de septiembre de acuerdo con medios locales, el área permanece cerrada al público mientras continúen las investigaciones y se determine si las característica del animal corresponden con los requisitos estatales para la caza.
La actual temporada de cacería en este estado comenzó el pasado 2 de septiembre y terminará el último día de este mes.
En Colorado, la interacción entre osos y humanos ha aumentado debido al incremento de la construcción de viviendas en zonas habitadas por estos animales y de hecho en julio pasado CPW advirtió de “frecuentes encuentros” con osos “cada vez más agresivos” en este estado.
El pasado 28 de agosto un hombre de 71 años se defendió con un bate de béisbol de un oso de 10 años y unos 100 kilos que entró en su casa.
Según CPW, desde abril pasado se han registrado 2.500 reportes sobre interacciones entre personas y estos mamíferos, con un saldo de 56 osos muertos y otros 23 atrapados.
Los ataques mortales de osos, no obstante, son infrecuentes y solo se contabilizan cinco decesos por esta razón desde 1934.
La última ocurrió hace una década: Donna Munson, 74 años, que murió el 6 de agosto de 2009 cuando se interpuso entre dos de estos animales para evitar que se peleen.