
SIN CORTAPISAS
Por: Claudia Vázquez Andrade
Tan iguales, a los que se fueron
En el senado de la Republica se acabó el “Turismo parlamentario”, así lo anunció Adán Augusto López Hernández, Presidente de la Junta de Coordinación Política en la cámara alta.
Queda claro que, con esta determinación, el gobierno federal y el Movimiento de Regeneración Nacional buscan evitar que los legisladores continúen exhibiéndose en viajes internacionales con lujos que hoy los mantiene en el ojo del “huracán” y que eran distintivo de los llamados prianistas.
Y por supuesto que no es errónea la determinación, pues se habla que habrá un ahorro de 500 millones de pesos, los cuales, como siempre que se habla de economías presupuestales, se asegura utilizarán para fortalecer el renglón de la salud.
Cosa que la verdad sea dicha, está en duda, porque los recortes han alcanzado a este sector que hoy en día se encuentra muy cuestionado por la ciudadanía ante la falta constante de medicamentos, equipo y hasta personal médico.
En fin, el punto es que los legisladores federales ya no podrán viajar al extranjero financiados con recursos del erario, porque a decir del mismo Adán Augusto, es turismo parlamentario, por lo menos así se infiere tras sus declaraciones.
En todo esto hay una verdad, y ésta es que el pueblo estaba acostumbrado a este tipo de viajes y los excesos de los mismos, por ello no causó mayor asombro, sin embargo, en este gobierno la exhibición de los lujos que hicieron indignaron al ciudadano común, no por el exceso, sino por la falta de congruencia. Olvidaron que los morenistas aseguraban no ser iguales.
De hecho, no faltó quien recordó, como ejemplo, la posición del senador Gerardo Fernández Noroña cuando era oposición y cuestionaba ese tipo de “derroches”.
El caso es que ya llegó la austeridad al senado, por ello, así se aseguró, ya rescindieron el contrato con la empresa que les prestaba el servicio de ballet parking, aunque ahora contrataron de manera directa a esos mismos empleados, pero no habrá aumento a partidas como el de dietas, salarios y otros.
Pues ahí está, una estrategia más de Morena y su gobierno para recuperar la confianza ciudadana después de los desaciertos cometidos por legisladores y algunos funcionarios que fueron “castigados” por la vida misma, que los volvió importantes, ricos y tan iguales a los que se fueron.