SIN CORTAPISAS

Por: Claudia Vázquez Andrade

Diputada a favor de Comapa.

Vaya que los tiempos han cambiado en la política de nuestro México, y los políticos también, porque en antaño era común escuchar discursos o explicaciones que, aunque no resolvían nada, de alguna manera dejaban conforme al ciudadano común, sobre todo cuando el cuestionado era un representante popular.

Mientras que hoy, los políticos y representantes del pueblo, como es el caso de los diputados, no guardan las formas, y menos les importa la imagen personal o de partido, de ahí que de pronto escuchemos declaraciones en donde evaden sus responsabilidades y sin empacho alguno culpan al mismo ciudadano de lo que sucede, así sean estos los que votaron por ellos.

Y en este momento el mejor de los ejemplos en Tamaulipas es la diputada morenista Blanca Anzaldúa Nájera, quien pese a ser integrante del consejo de administración de Comapa Victoria, olímpicamente pidió a los quejosos del organismo operador del agua, pregunten directamente a la gerencia el porqué de tantas fugas. Caray, en este caso se podría pensar dos cosas de la actitud de la maestra Blanca.

Primero: que acude a las sesiones del organismo y solo levanta la mano para aprobar lo que se haya propuesto en las reuniones, y segundo: que le interesa muy poco, por no decir nada, las problemáticas de sus representados, así forme parte de las estructuras del poder. Pero lo más criticable de sus declaraciones, es el hecho de que apruebe los altos cobros de la Comapa que se han denunciado en los últimos meses, y los justifique bajo el argumento de que son ajustes en el servicio a quienes no cuentan con medidores.

Y toda vía peor, que esté a favor de que la Comapa incremente el costo del servicio porque dice, que solo así la gente va a cuidar el agua, porque asegura que aun en los tiempos de sequía extrema que vivimos en esta capital, desperdiciaban el agua lavando las banquetas a “chorro de manguera”.

Así que, si pensaba contar con la diputada Blanca Anzaldúa como una aliada para su defensa, pues olvídelo, porque ya dejó claro que es una convencida de que las personas solo entienden, porque así lo dijo, “cuando le duele el bolsillo”.

A que diputada, tal parece que nada aprendió en su paso o relación con el priísmo, y alguien debería decirle que su percepción o análisis no le favorece en nada y menos a su partido. Ahora sí que podríamos decir que con estos “amigos” para que queremos enemigos.