SIN CORTAPISAS
Por: Claudia Vázquez Andrade.
La “suerte” de los juzgadores.
No cabe la menor duda que los tiempos han cambiado, que la llamada cuarta transformación de alguna manera, para bien o para mal también ha cambiado la vida de los mexicanos y obvio de los tamaulipecos, al grado que hoy en día se necesita casi para todo “una pizca” de suerte.
Para ejemplo, ahí está el caso de magistrados, jueces y ministros, quienes con la llamada reforma judicial, tanto los que van de salida, como los que entrarán, estarán sujetos a la famosa “tombola” implementada en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, y el actual gobierno la acogió también. Por lo pronto, el senado ya hizo la primera parte del plan “C”, que es seleccionar, claro, con la famosa “tombola”, quienes serán los primeros ministros, jueces y magistrados que serán relevados en sus cargos.
Los nombres de los “suertudos” que serán los primeros en ser echados se dieron a conocer, así que el primer domingo de junio de 2025 se escogerán 850 cargos del Poder Judicial: 464 magistraturas de circuito y 386 jueces de distrito. Y en 2027, los mexicanos irán de nuevo a las urnas a escoger al resto de sus juzgadores.
Para nadie es un secreto que la reforma judicial se llevó acabo pensando en hacer de ese poder, un poder realmente independiente, además de terminar con la presunta corrupción que la envuelve, y la justifican con casos como Tamaulipas, en donde presuntos delincuentes han gozado de la protección de la misma justicia que los ha amparado una y otra vez.
En fin, si algo es cierto, es que una elección popular no es garantía de honestidad y menos de anticorrupción, y prueba de ello, ahí están los ex gobernantes encarcelados y otros tantos acusados de cualquier cantidad de delitos, incluso, resguardados en el vecino país del norte para no ser alcanzados por la justicia, esa que en este momento es cuestionada en su honestidad. Pero como siempre decimos, bienvenido todo aquello que venga a darnos una mejor forma de vida y garantizarnos nuestros derechos.