Triunfo con tormenta para EU en la Copa Oro
Estados Unidos venció ayer 3-1 a Jamaica en el Nissan Stadium de Nashville y jugará la final de la Copa Oro contra la selección de México que dirige el argentino Gerardo Martino.
En un encuentro que tuvo que ser interrumpido durante cerca de una hora y media por una tormenta eléctrica, los locales fueron muy superiores a los Reggae Boyz y avanzaron a la última instancia gracias a los tantos de Weston McKennie a los nueve minutos y Christian Pulisic (52’ y 87’), que neutralizaron el gol de Shamar Nicholson (69’).
Jamaica y Estados Unidos se habían convertido en enemigos íntimos en los últimos tiempos: los caribeños dejaron afuera a los norteamericanos en las semis del 2015 y éstos se alzaron con la copa en 2017 al derrotarlos 2-1 en la final, mientras que los Reggae Boyz se impusieron 1-0 en un amistoso en la previa del torneo actual.
Los locales, que no habían concedido ni un solo gol en toda la Copa Oro, se habían llenado. Sin embargo, de dudas en su escueto triunfo 1-0 ante Curazao en cuartos.
Y, para evitar una mayor displicencia de sus pupilos, el DT Gregg Berhalter decidió introducir hasta cuatro modificaciones en su once inicial, entre ellas la inclusión del ariete Jozy Altidore en detrimento de Gyasi Zardes.
Aun con el miedo en el cuerpo por su desempeño en su último encuentro, los de las barras y las estrellas quisieron sentenciar la semifinal desde los compases iniciales.
Estados Unidos inició con tres ataques peligrosos. Y a la cuarta fue la vencida: Michael Bradley encontró por el carril derecho a Cannon, el lateral centró al corazón del área y McKennie apareció por sopresa para, ahora sí, vencer al arquero Andre Blake.
El dominio era absoluto. La sensación de que el segundo podía llegar en cualquier momento, también. Pulisic la estrelló en el vertical en un lanzamiento de falta y el vendaval se transformó en tormenta. La misma que interrumpió durante casi una hora y media el juego mientras pasaba por Nashville.
Con la vuelta al campo, el control se tornó en frialdad e imprecisión. Jamaica entró en cambio en calor y gozó de la primera clara a los 18 con un mano a mano de Leon Bailey, que remató mordido a las manos de Zack Steffen.
Pulisic hizo el segundo tanto de la noche, el primero suyo, al aprovechar un rechace del portero a un disparo previo de Jordan Morris.
Zardes ingresó al campo y tuvo en sus botines la oportunidad de anotar, pero fue Shamar Nicholson el que recortó distancias a los 69’ con un gran testarazo.
A partir de ahí, los caribeños se volcaron en busca de un empate que nunca llegó y Pulisic sentenció la contienda tras beneficiarse de otro rechazo dentro del área.
El domingo, estadunidenses y mexicanos chocarán en una final soñada entre los dos cuadros más condecorados del evento.