Por esto la Generosidad No Tiene Hora: Patty Chio
Por esto la Generosidad No Tiene Hora: Mi Madre Enseñó a Toda la Ciudad el Verdadero Espíritu de Dar.
Una Navidad, después de un largo día en nuestra zapatería, mi familia y yo llegamos a casa tarde, listos para cenar. Pero mi madre tenía otros planes. A pesar de que eran las 10:30 de la noche y todos estábamos agotados, ella decidió llevar dos pollos rostizados que sobraron a una familia necesitada
Todos queríamos que esperara hasta mañana, pero ella insistió y se fue sola. Regresó media hora después, justo cuando nos sentábamos a cenar. Resulta que esa familia solo tenía dos huevos para su cena navideña. Mi madre siempre nos enseñó que cuando sientes que debes hacer algo, simplemente debes hacerlo. Esa noche, no solo entregó comida, sino una poderosa lección de generosidad y empatía