Su pasión, rescates en la montaña; Día del Socorrista
María del Rosario Madrigal Velasco logró un sueño para muchos adultos: combinar su amor por la montaña y su vocación de socorrista en la Cruz Roja Mexicana.
Ella es socorrista y ha ayudado a montañistas heridos o extraviados a descender de montañas y volcanes.
Es jefa de la sección de Búsqueda y Rescate de la Cruz Roja Mexicana y su equipo, conformado por 24 socorristas, trabajan, principalmente, en el volcán Iztaccíhuatl, el Nevado de Toluca y el Pico de Orizaba.
Aunque no siempre logran encontrar con vida a los montañistas, Rosario asegura que su labor también consiste en entregar a las familias los cuerpos.
“La mayoría de los rescates son de montañistas que podemos sacar con vida, pero a veces sólo vamos por los cuerpos”, dijo.
La jefa de búsqueda participó en el operativo de rescate de Aidé Alvarado Castillo, de 23 años, quien era estudiante de música, que falleció en el volcán Iztaccíhuatl.
Ese rescate significó mucho para ella, porque dentro de la comunidad de montañistas, la joven era apreciada y reconocida.
“Con Aidé, fue una búsqueda que se extendió por 10 días, en donde colaboramos muchos montañistas, muchos grupos de rescate, muchos montañistas escaladores. Con Aidé, se dio una hermandad”, recordó.
Pese al peligro que representa el montañismo, María del Rosario cree que vale la pena correr el riesgo por la libertad que representa la naturaleza.
“No te puedes privar de vivir la experiencia. La parte que nosotros vivimos en la montaña esa sensación de libertad, esa sensación de amar la naturaleza, de convivir con la naturaleza”, expresó.
Aunque parece un reto ejercer el rescate de montaña, Madrigal aseguró que hombres y mujeres son iguales en los volcanes y montañas.
“Sí es dificil, porque ven a la mujer como la figura débil, pero en la montaña yo creo que todos somos fuertes, no hay distinción entre nosotros”, afirmó.